viernes, 29 de agosto de 2008

Cambalache - Dicépolo


(cantado por Julio Sosa)

Que el mundo fue y será una porquería,
Ya lo sé;
En el quinientos seis
Y en el dos mil también;
Que siempre ha habido chorros,
Maquiavelos y estafaos,
Contentos y amargaos,
Valores y dubles,
Pero que el siglo veinte es un despliegue
De malda' insolente
Ya no hay quien lo niegue;
Vivimos revolcaos en un merengue
Y en un mismo lodo todos manoseaos.

Hoy resulta que es lo mismo
Ser derecho que traidor,
Ignorante, sabio, chorro,
Generoso, estafador.
Todo es igual; nada es mejor;
Lo mismo un burro que un gran profesor.
No hay aplazaos, ni escalafón;
Los inmorales nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
Y otro roba en su ambición,
Da lo mismo que si es cura,
Colchonero, rey de bastos,
Caradura o polizón.

Que falta de respeto,
Que atropello a la razón;
Cualquiera es un señor,
Cualquiera es un ladrón.
Mezclaos con stavisky,
Van don bosco y la mignón,
Don chicho y napoleón,
Carnera y san martín.
Igual que en la vidriera irrespetuosa
De los cambalaches
Se ha mezclao la vida,
Y herida por un sable sin remaches
Ves llorar la biblia contra un calefón.
Siglo veinte, cambalache
Problematico y febril;
El que no llora, no mama,
Y el que no afana es un gil.
Dale nomás, dale que vá,
Que allá en el horno nos vamo a encontrar.
No pienses mas, echate a un lao,
Que a nadie importa si naciste honrao.
Que es lo mismo el que labura
Noche y día como un buey,
Que el que vive de los otros,
Que el que mata o el que cura
O esta fuera de la ley.

martes, 19 de agosto de 2008

Fragmento de Hamlet - Shakespeare

" Polonio - ¡Todavía aquí Laertes! ¡ A bordo, a bordo! ¡ Qué vergüenza! El viento sopla en la popa de tu nave, y sólo aguarda tu llegada. Acércate. ¡ Que mi bendición sea contigo! Y procura imprimir en tu memoria estos pocos preceptos. No propales tus pensamientos ni ejecutes nada inconveniente. Sé sencillo, pero en modo alguno vulgar. Los amigos que escojas y cuya adopción hayas puesto a prueba, sujétalos a tu alma con garfios de acero, pero no encallezcas tu mano con agasajos a todo camarada recién salido del cascarón. Guárdate de entrar en pendencia; pero una vez en ella, obra de modo que sea el contrario quien se guarde de ti. Presta a todos tu oído, pero a pocos tu voz. Oye las censuras de los demás, pero reserva tu juicio. Que tu vestido sea tan costoso como tu bolsa lo permita, pero sin afectación en la hechura; rico, mas no extravagante, porque el traje revela al sujeto, y en Francia las personas de más alto rango y posición son en esto modelo de finura y esplendidez. No pidas ni des prestado a nadie. Pues el prestar hace perder a un tiempo al dinero y al amigo, y el tomar prestado embota el filo de la economía. Y sobre todo, esto: sé sincero contigo mismo, y de ello se seguirá, como la noche al día, que no puedas ser falso con nadie ...."

( Acto Primero, Escena III)

miércoles, 13 de agosto de 2008

"Es tu presencia"

Es tu presencia, sí, esa otra parte mí
Que me dice que estás ahí,
Quieto, esperando verte sonreír.
Ese otro sentido que nubla el resto,
No escucho, no veo, no huelo,
Pero soy más sensible, más sensorial.
Inquieto, espero una suave caricia
Que no llega, una mirada que deslumbre,
Sincera, que hable claramente.
Pero no encuentro más que un fuego
Intenso, en un mar en calma.
Que más que esperanza,
Alberga en mí desesperanza.
Y mi comportamiento se vuelve estúpido,
Inútil, inmaduro, irracional.
No irracional porque vague libremente,
Sino precisamente, porque libremente,
No reclamaría tu atención,
Simplemente me la robarías.


Aunque quizás después,
sin saber bien por qué,
no sabría o no querría,
recoger el brote tierno
de una perdida pasión.

martes, 12 de agosto de 2008

Sobreviviendo - Victor heredia



Me preguntaron como vivía, me preguntaron
"Sobreviviendo" dije, "sobreviviendo".
Tengo un poema escrito más de mil veces,
en él repito siempre que mientras alguien
proponga muerte sobre esta tierra
y se fabriquen armas para la guerra,
yo pisaré estos campos sobreviviendo.
Todos frente al peligro, sobreviviendo,
tristes y errantes hombres, sobreviviendo.

Sobreviviendo, sobreviviendo.
Sobreviviendo, sobreviviendo.

Hace tiempo no río como hace tiempo,
y eso que yo reía como un jilguero.
Tengo cierta memoria que me lastima,
y no puedo olvidarme lo de Hiroshima.
Cuánta tragedia, sobre esta tierra...
Hoy que quiero reírme apenas si puedo,
ya no tengo la risa como un jilguero
ni la paz de los pinos del mes de enero,
ando por este mundo sobreviviendo.

Sobreviviendo, sobreviviendo.
Sobreviviendo, sobreviviendo.

Ya no quiero ser sólo un sobreviviente,
quiero elegir el día para mi muerte.
Tengo la carne joven, roja la sangre,
la dentadura buena y mi esperma urgente.
Quiero la vida de mi cimiente.
No quiero ver un dia manifestando
por la paz en el mundo a los animales.
Cómo me reiría ese loco día,
ellos manifestándose por la vida.
y nosotros apenas sobreviviendo,
sobreviviendo.

Sobreviviendo, sobreviviendo.
Sobreviviendo, sobreviviendo.






Muy linda también la versión de Mercedes Sosa.




Si comes,
sobrevivirá el cuerpo.
Si amas,
sobrevivirá el alma.

martes, 5 de agosto de 2008

La adoración del becerro de oro

En tiempos duros, de represión y falta de libertad y accesibilidad, parece que se tienen claras las cosas que son realmente importantes, y las que son accesorias. Parece que todo lo conseguido es todo un mundo, aunque falte mucho por conseguir, y que todo ello sólo se obtiene mediante el esfuerzo y la formación. Son tiempos de realismo, aunque se pretenda la evasión en el sensorialismo; tiempos de entrega, y también de generosidad, solidaridad y camaradería. Es como si lo más humano del hombre apareciera en su momento de mayor angustia, cuando el final acecha a cada paso; la muerte que nos hace estar vivos.

Sin embargo, en tiempos de bonanza, "libertad", y se podría decir una vida media asequible, todo lo anterior en su mayoría se desvanece , desaparece, no totalmente, pero mucho en parte. Se pierde la noción de lo que esta primero y lo que puede esperar. Será que la rapidez de los acontecimientos que nubla aquello que no depende del tiempo, y por contra está ligado a él. Lo cierto es que entonces, lo importante no es tener, es tener más que. Como diría nietsche, el tiempo del nihilismo pasivo. Proceso que está inmerso en el aburrimiento y en la estupidez colectiva. Dónde desaparcen la elegancía, los valores, y al parecer, hasta los actos de vandalismo se consideran cultura. Anque a muchos les pese, esto es lo que la globalización, el desarrollo y la democracia han traido a este país. Una libertad muy distorsionada frente a la que cabía esperar. Y es que como decía Aristóteles, cuando en la democracia entra la demagogia, esta se convierte en tiranía.

No obstante, los procesos no son eternos, los cambios se producen constantemente, quizás ahora, quizás dentro de mucho. Ahora bien, ¿son incompatibles, la estabilidad, el desarrollo y el decoro? Yo pienso que no, pero es algo que parece difícil de alcanzar.

lunes, 4 de agosto de 2008

Fragmento de La Caverna - José Saramago

" Autoritarias, paralizantes, circulares, a veces elípticas, las frases de efecto, también jocosamente llamadas pepitas de oro, son una plaga maligna de las peores que puedan asolar el mundo. Decimos a los confusos, Conócete a tí mismo, como si conocerse a uno mismo no fuese la quinta y más dificultosa operación de las aritméticas humanas, decimos a los abucólicos, Querer es poder, como si las realidades atroces del mundo no se divirtiesen invirtiendo todos los días la posición relativa de los verbos, decimos a los indecisos, Empezar por el principio, como si ese principio fuese la punta siempre visible de un hilo mal enrrollado del que basta tirar y seguir tirando asta llegar a la otra punta, la del final, y como si, entre la primera y la segunda, hubiésemos tenido en las manos un hilo liso y continuo del que no ha sido preciso deshacer nudos ni desenredar marañas, cosa imposible en la vida de los ovillos y, si otra frase de efecto es permitida, en los ovillos de la vida. Marta dijo al padre, Empecemos por el principio, y parecía que sólo faltaba que uno y otro se sentaran delante del tablero para modelar muñecos con unos dedos súbitamente ágiles y exactos...."